Las ciruelas deshidratadas son un alimento nutritivo y saludable. A pesar del proceso de deshidratación la ciruela mantiene intacta todas las propiedades e incluso se potencian.
Fuente de Energía
Durante el proceso de desecado la ciruela da lugar a una mayor concentración de glucosa. Por esto es que se vuelve en una fuente inagotable de carbohidratos y glucosa indispensables para generar energía a quienes realizan mucha actividad física. De manera tal que resulta un gran aliado para deportistas o para recuperar energía después de hacer deporte.
Rica en fibra
Las ciruelas desecadas son 5 veces más ricas en fibras que las ciruelas en fresco. Esto, significa que es muy beneficioso para nuestra flora intestinal.
Gran contenido de magnesio
El magnesio es un elemento esencial para el desarrollo de los músculos y en las ciruelas existe una alta concentración del mismo. Así mismo, el magnesio actúa como un antioxidante que evitará toxinas que perjudican nuestra salud. Esto también evita enfermedades como la hipertensión y el cáncer.
Propiedades bactericidas
Las ciruelas desecadas D’Agen favorecen a la descomposición de las grasas insaturadas provenientes de las carnes.
Se destacan por ser ricas en provitamina A, vitamina B3, y la vitamina C.
También aporta minerales, como el potasio (ayuda en la transmisión del impulso nervioso), magnesio (mejora el buen funcionamiento del sistema inmunológico) y el hierro.